Bang, bang... la muerte sopló en Pedrosillo de los Aires.
Bang, bang... donde Hermenegilda suspiraba en cada rezo.
Bang, bang... donde coser era la forma de dibujar los paisajes.
Bang, bang... y donde leer los posos del café era saber que ocurriría en el cielo.
Banga, bang... Hermenegilda, arrodillada, miró a su marido desde el suelo.
Bang, bang...que, entre bostezo y bostezo, limpiaba su escopeta con recelo.
Bang, bang... y apuntando, sin querer, a la mismísima virgen del Consuelo.
Bang, bang... dejó escapar dos tiros, dando por terminados todos los rezos.
Bang, bang... donde Hermenegilda suspiraba en cada rezo.
Bang, bang... donde coser era la forma de dibujar los paisajes.
Bang, bang... y donde leer los posos del café era saber que ocurriría en el cielo.
Banga, bang... Hermenegilda, arrodillada, miró a su marido desde el suelo.
Bang, bang...que, entre bostezo y bostezo, limpiaba su escopeta con recelo.
Bang, bang... y apuntando, sin querer, a la mismísima virgen del Consuelo.
Bang, bang... dejó escapar dos tiros, dando por terminados todos los rezos.
1 Comentarios:
Buenas letras las suyas.
By Anónimo, at 8:28 p. m.
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1 Comments:
Buenas letras las suyas.
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