domingo, septiembre 11, 2005

Miserias

La puta se recompuso lo antes posible. Mientras buscaba la peluca azul de pelo liso bajo unos calzoncillos manchados de semen, se dio cuenta de que era su cumpleaños. Se subió los panties, puso su falda a la altura de las caderas y salió con los zapatos de tacón en la mano. Cuando cerró la puerta y vio su cara en el espejo del pasillo, se acordó de que ella nunca había querido ser puta.
Si no queda satisfecho no le devolvemos su paciencia.Gracias