viernes, marzo 21, 2008

Bang, bang... la muerte sopló en Pedrosillo de los Aires.
Bang, bang... donde Hermenegilda suspiraba en cada rezo.
Bang, bang... donde coser era la forma de dibujar los paisajes.
Bang, bang... y donde leer los posos del café era saber que ocurriría en el cielo.
Banga, bang... Hermenegilda, arrodillada, miró a su marido desde el suelo.
Bang, bang...que, entre bostezo y bostezo, limpiaba su escopeta con recelo.
Bang, bang... y apuntando, sin querer, a la mismísima virgen del Consuelo.
Bang, bang... dejó escapar dos tiros, dando por terminados todos los rezos.

sábado, marzo 15, 2008

acróbata vaginal

Decía que estaba cansada de ser actriz porno porque ya no aguantaba escenas con dos hombres que le intetaban dar placer al mismo tiempo. Que ese concepto del "aquí te pillo aquí te mato" ya no iba con ella. Así que, un día, después de comprobar que tenía unas dotes de las que mucha gente carecía y que además, le hacían especial, decidió convertirse en acróbata vaginal contando con que introducirse elementos de más de 50 cm en sus partes bajas, no era para ella un problema.
El caso es que viéndola en la televisión de patas abiertas, con una cadena lo suficientemente larga como para atar a dos personas juntas pensé: está claro que esta mujer sabe lo que quiere en la vida.

lunes, marzo 10, 2008

No quería

Me prometí que esta noche, con la rabia contenida, no escribiría nada. Me mentí. La tristeza es tan grande que asumir lo que ya "sabíamos" es lo más duro que existe. Y es que, mientras las banderas rojiblancas apuntaban al cielo y los gritos y los cláxones se escuchaban por Madrid, él se marchaba solo, mamá. Bajaba las escaleras a paso lento después de abrazar a los pocos "amigos" que le quedaban en la sede. Esos "rojos" con barba gris y olor a cigarro que dan palmadas en la espalda como consuelo. Pero esta noche, las palmadas y los abrazos no eran suficientes porque los charcos de la calle habían engullido nuestra tristeza. Quizás mañana, se hayan secado pero hoy, solo puedo decirte que tenías razón y que aunque es duro reconocer que esto es el claro espejo de lo que quieren los españoles, la derrota nos la han servido en bandeja de plata.
Mañana, será otro día.

viernes, marzo 07, 2008

Llorar

miércoles, marzo 05, 2008

Don Quijote

Ví a Don Quijote tumbado en la camilla de la habitación 230 del hospital Reina Sofía de Tudela.
Miraba por encima del borde de las sábanas y de vez en cuando decía que sacaba el brazo derecho de entre los duros pliegues para acordarse de que todavía lo seguía teniendo.
Le dije a mi madre que le hiciera una foto con el móvil porque no todos los días se podía ver a un antihéroe con el caballo aparcado en la sala de espera.
Ella, ladeó la cabeza, miró con el rabillo del ojo derecho a Don Quijote y dijo:

- No. Hoy tiene que dormir pero tu coge al caballo y llévatelo con Dulcinea.
Si no queda satisfecho no le devolvemos su paciencia.Gracias