Desde el infierno

Desde el infierno subo todos los días hasta el asfalto de Fuencarral. Parece que se ponen todos de acuerdo para detener los mecanismos de los peldaños móviles al mismo tiempo y hacernos andar casi en posición horizontal a la pared, como Gene Kelly. Hoy una mujer resoplaba mientras intentaba hacer frente a la inmensidad que se le venía encima acompañada de una pequeña gota que se deslizaba sin ningún pudor desde el cuello hasta el escote. Un viejo miraba con lascividad la trayectoria de la gota salada; la mujer se ha percatado y sintiéndose atractiva ha empezado a respirar hondamente como dejando que la gota se desenfrenara contra su pecho. El viejo ha clavado sus ojos en las tetas de la mujer que poco a poco se inflaban mientras se estiraba sacando el pompis hacia fuera. La situación era incómoda y divertida al tiempo y las escaleras se acababan y yo quería seguir grabando esa escena erótica pero me era imposible. Hoy marcaba el termómetro 39 grados...Espero que dentro de algunos días venga viento fresco. Por el bien de todos.