miércoles, octubre 27, 2004

Hoy estaba en la calle de la Montera mirando a una fachada en la que había una pancarta que decía lo siguiente: Prostitución fuera de la calle de la Montera.
Debajo del cartel había una prostituta y enfrente suya, a unos tres o cuatro palmos de distancia, un hombre que requería sus servicios; en medio de ambos, un barrendero retirando las primeras hojas de un terrible día de otoño.

lunes, octubre 25, 2004

- Todo iba bien... ¿sabes?
- Sí, pero entonces...¿Qué falló?. ¿Él no fue como quisiste que fuera?
- Sí. Bueno, hasta cierto punto.
- No lo entiendo, si todo era perfecto qué hizo que lo dejases plantado.
- Cuando me levanté y fui al baño, su cepillo de dientes estaba al lado del mío.

sábado, octubre 23, 2004

Todos los niños tuvimos una guerra, una batalla sin armas, sólo con la conciencia. Todos nos vestimos de mujer y nos pintamos lo labios mientras insertábamos nuestros diminutos pies en unos zapatos de tacón. Todos lloramos delante del espejo del cuarto de nuestros padres y quisimos ser actores por un día, al tiempo que oíamos los aplausos en nuestra imaginación cuando cruzábamos una alfombra roja. Pero sólo algunos quisimos ser niños para siempre y rendirnos en los brazos del aire frío del invierno mientras sentíamos, con los ojos cerrados, cómo se deslizaba una lágrima por nuestras mejillas y volvía a entrar por nuestra boca de nuevo.

jueves, octubre 21, 2004

Hoy me aprietan las costuras de la piel, el traje que me hicieron a medida a comenzado a quedarse flácido y han aparecido misteriosamente unas bolsas en los costados y debajo de los ojos.
He ido a un sastre para que lo pusiera a punto pero me ha dicho que la solución no era volverlo a coser entero sino cambiar mi disfraz por otro. Yo le he respondido que en ese caso yo dejaría de ser quien soy para convertirme en otra y el me ha respondido: ¿acaso no buscamos siempre eso?.

martes, octubre 19, 2004

Who wants to live forever?
There's no time for us
There's no place for us
What is this thing that builds our dreams
And slips away from us?
Who wants to live forever?
Who wants to live forever?
There's no chance for us
It's all decided for us
This world has only one sweet moment
Set aside for us
Who wants to live forever?
Who wants to live forever?
Oh! Touch my tears with your lips
Touch my word with your fingertips
And we can have forever
And we can love forever
Forever is ours today
Who wants to live forever?
Who wants to live forever?

lunes, octubre 18, 2004

El café se quedó frío en la mesa de madera. Metí la cuchara y removí lentamente la sustancia líquida que tenía aspecto de agua coloreada. Ella notó que estaba aturdida, sin saber qué decir ni hacer; necesitaba respirar silencio, pero a ella le inquietaba la soledad de su propia canción suspendida en el ambiente cargado por el humo. Puso su mano encima de la mía y la retiré con cuidado, eso la entristeció, pero siguió con el nudo en la garganta sin derramar ni una sola lágrima. Le dije que todo había acabado, que el frío había llegado hasta mi piel y esta vez la había traspasado. Mi corazón suicida había gastado todas las vidas que tenía guardadas en la mochila y hoy era el día de otro comienzo inesperado, hoy era ya mañana y ayer en uno solo, hoy se había agotado el tiempo que guardaba en mi mano izquierda y que la estaba ahogando, hoy me desprendí de los relojes sin agujas para esperar al último tren.

domingo, octubre 17, 2004

No sabía por qué ya no se me erizaba la piel cuando me tocabas; un día me di cuenta de que lo hacías con los ojos abiertos.

viernes, octubre 15, 2004



Solo me queda respirar en un cristal y escribir con el dedo índice mis secretos, aunque sea por unos míseros segundos, y así, quizás dejen de ahogarme.

jueves, octubre 14, 2004

No me callo porque no me da la gana y porque pienso que tengo razón. No he tolerado nunca la violencia ni nada que ésta lleve aparejado. No quiero a una persona de la División Azul desfilando como si nada por una calle, no lo tolero. Al igual que tampoco dejo de decir que hay que pensar antes de actuar por mucho que nos duela. ¡Ah! y todos los políticos no son iguales, creo que eso es una falsa excusa que la gente se saca de la manga porque realmente no quiere sacar a relucir su ignorancia política. Me da igual si me cierro a cuatro bandas, creo que tengo derecho a hacerlo.

miércoles, octubre 13, 2004

Su nuca desnuda, con un moño agarrado gracias a una goma de color rojo. Su espalda semidesnuda por culpa de una camiseta abierta por donde no debía abrirse. Los brazos pegados al cuerpo para que no comenzaran a temblar. Una falda negra de algodón fino cubría el resto de su cuerpo marcando cada milímetro de su piel. Mi labios posados al comienzo y final de un mechón mal puesto. Mis manos en una cintura muy estrecha. Mi manos apoyadas en la suyas, también temblorosas. Mis ojos cerrados, sin abrirse por miedo a encontrame con una realidad no soñada.

lunes, octubre 11, 2004

Me dijo que el ser humano se componía de alma y cuerpo y que al comienzo el alma debía enseñar al cuerpo a saber quién era y cuál era su papel en la Tierra.
Luego me dijo que al principio todos éramos inocentes y que el mal emergía de manera inconsciente, como si el cuerpo, cansado de hacer caso al alma, comenzara a ir por libre.
Más tarde me comentó que no nos podíamos llevar nada de lo que aquí teníamos, que todo aquello que habíamos realizado con nuestras manos se quedaba en las de otros, conocidos y desconocidos.
Y siguió divagando acerca de nuestro papel en el mundo y de que el futuro ya estaba escrito y que el presente realmente solo era trayecto fraccionado en el que todo lo que lo componía eran pasado y futuro mezclados.
Yo, mientras esto pasaba, miraba al techo, descifrando o por lo menos intentándolo, toda aquella información que se deslizaba por su lengua hasta posarse en el aire, porque realmente no sabía cómo canalizarla, ni qué hacer con ella.
No me creía nada de lo que me decía, únicamente asentía y es que, por mucho empeño que pongan, lo mío nunca fueron las cosas abstractas y sobrenaturales.

sábado, octubre 09, 2004

Comencé a interesarme por el mundo, cuando lo estaban destruyendo.

jueves, octubre 07, 2004

Estoy en medio de la calle, con los brazos en jarras, la boca abierta y la lengua fuera. Me alimento de las gotas que caen del cielo porque hoy me han dicho que eran sueños de distintos colores y si los tragabas, podrías convertirte en una persona más felíz. Así que, como a mi no me hace falta más tristeza, porque parece que se va almacenando y que no sale nunca del cuerpo, he pensado que si bebo sueños dulces, quizá maten las amarguras momentáneas.

martes, octubre 05, 2004

Se me han metido unas pequeñas piedras en el zapato. Al principio he pensado en sacármelas pero luego me ha dado pereza quitarme el zapato y agitarlo, así que las he dejado reposando en la planta.
Esta mañana he pensado en deshacerme de ellas, pero al cabo del rato me he olvidado de hacerlo y me he puesto el zapato como si nada y no he sentido en todo el día las piedras pululando de un lado para otro y es que se habían acomodado tranquilamente, cada una en un lado.
Así que he decidido que quizás las deje ahí, calientes entre mi piel y la planta roja de mi calzado porque quizás con el tiempo me olvide por completo de que algún día existieron y de que una tarde comenzaron a molestarme.

lunes, octubre 04, 2004

Tengo los pies en alto, rozando las nubes grises que están a punto de estallar y romper a llorar y me empapan poco a poco los talones.
Respiro fuerte y se me hincha el vientre; noto algo en mi interior que se remueve incansable y que no me deja dormir, aún no le he preguntado por qué lo hace, le estoy dando su tiempo, por si acaso se calma de repente.
Las nubes se deslizan por mis piernas y la niebla cubre mi tripa y mi pecho sin dejarme respirar, creo que dentro de poco volveré a cerrar los ojos.
Agarro mis dedos a la tierra, dejando las marcas de mis uñas como señal para que cuando la criatura de mi vientre se deslice por mis piernas, sepa donde estuvo tumbada mi espalda y pueda sentir el calor.
Hoy me ha mirado desde el suelo, acurrucada en una hoja de platanero y por fín he podido bajar mis pies del cielo y cogerla con mis brazos.
Me ha sonreído, yo la he mirado con cariño y esta vez sí, he cerrado los ojos.

viernes, octubre 01, 2004

Hoy he dibujado una puerta en el cielo con el dedo. Era de color azul añil y la pintura estaba descascarillada por los años y la lluvia, se parecía a aquellas que veíamos en los pueblos con mar. La he abierto y he asomado la cabeza con miedo. Tú me has empujado fuera, me has dicho que no debía dudar a estas alturas, que ya era mayor como para no saber caminar sola, únicamente debía seguir la línea imaginaria de mis pensamientos. Yo te he mirado con rencor, parecía que tenías prisa porque saliera; te has reído de mi, me has dado un beso en la mejilla y me has susurrado al oído "se valiente". Yo te he mandado a la mierda, porque sé lo cobarde que soy, aunque no lo aparente y no sé si tendré tan claros mis pensamientos como para poder andar sobre una línea recta o pisar, una vez más, sobre mojado.




Si no queda satisfecho no le devolvemos su paciencia.Gracias